HISTORIAL

“A mí no me hables de música. Háblame de botnets”.

Las habilidades matemáticas y tecnológicas de Nam le permitieron conseguir una Beca Nacional de Excelencia Académica en el KAIST (el Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea). Sirvió en el Ejército de la República de Corea (ROKA), donde la asignaron a la División 5163 gracias a sus conocimientos tecnológicos. Buscando la forma de huir de una vida de despacho, Nam se labró su camino hasta la 9ª Brigada de las Fuerzas Especiales, también conocida como “el cuerpo Fantasma”. Allí recibió entrenamiento de alpinismo, técnicas de supervivencia y guerra de guerrillas. Nam es una persona que se adapta fácilmente, y utiliza métodos creativos y poco ortodoxos para conseguir resultados. Esa es una habilidad que no le pasó desapercibida ni a las Fuerzas Armadas de Estados Unidos en Corea ni al 707º Batallón de Misiones Especiales. Nam se especializó en romper defensas y buscar debilidades de redes enemigas, y este último cuerpo la reclutó junto con el agente Chul Kyung Hwa (“Vigil”) antes de que se unieran a Rainbow. Ahora trabaja codo con codo con el agente Masaru “Echo” Enatsu en el laboratorio de I+D, diseñando nuevas contramedidas tecnológicas.

INFORME PSICOLÓGICO

Grace Nam es una persona inteligente, bromista, profunda y osada: más o menos como los dokkaebi mitológicos de los que recibe su apodo. También es un tanto maliciosa, y todo apunta a que últimamente se está llevando demasiado al límite. Su equipo cree que se ha vuelto demasiado confiada. En el pasado hubo informes disciplinarios que decían que sus métodos eran poco ortodoxos… y no tengo problema para creerlo. Recuerdo cuando hackeó nuestro sistema, algo en lo que yo vi su potencial, aunque muchos quisieran castigarla. […]

Nam es una agente con gran talento, pero no hay que olvidar que es una de las reclutas más jóvenes de Rainbow, y apenas tiene experiencia de combate. Este trabajo es intenso, y nos jugamos mucho. Hay días en los que tengo la impresión de que preferiría estar tras la pantalla de un ordenador, controlándolo todo fuera del alcance de los demás. Pero también quiere mejorar, cambiar. Y para hacerlo, tiene que retarse a sí misma.

Estoy seguro de que su exceso de confianza se debe al miedo. Tiene miedo de no encajar, de no ser lo bastante buena. Y en cuanto a esos informes disciplinarios… el problema era de sus comandantes, no de Nam. A un hacker con talento no solo se le dan bien los códigos, sino que piensa de forma creativa y puede ver cosas que los demás pasamos por alto. Sí, es imprudente. Y sí, es un poco fanfarrona. Pero hay que reconocer que la “locura” de Nam sigue un método. […]

Cuando le pregunté por su infancia presumió de pelearse en el patio del colegio, y me habló de la enorme presión académica a la que estaba sometida. El colegio solía avergonzar a los padres comparando públicamente a los estudiantes. Nam ha sentido toda su vida que los demás esperan algo de ella. Por eso, las reprimendas del agente Chul Kyung Hwa ("Vigil") causan una cierta tensión a la que tendrá que enfrentarse. […]

Me dijo que siendo pequeña descubrió el budismo de la mano de sus abuelos, y que hace poco empezó a ir al templo otra vez. Me tranquiliza. Es algo que le ayudará a despejar la mente y calmar su espíritu. La búsqueda de paz interior le permitirá a Nam desarrollar todo su potencial. Y aunque su arrogancia moleste a otros agentes, como Yumiko Imagawa ("Hibana")… creo que es mejor que la dejemos ser ella misma.

-- Dr. Harishva Pandey ("Harry"), director de Rainbow