¡Saludos, capitanes!

Si habéis seguido nuestros anteriores blogs de desarrollo, ya os habréis hecho una idea de las posibilidades que tiene el arsenal de vuestro barco, ya sabréis cómo preparar la travesía para que las armas de vuestro barco funcionen correctamente y también habréis recibido un curso acelerado de combate naval. ¡Llegó el momento de ver lo que oculta el horizonte y pescar peces más gordos!

Capitanes, una advertencia antes de continuar. Estamos deseando enseñaros un adelanto de Skull and Bones. No obstante, algunos de los detalles que compartamos podrían cambiar antes del lanzamiento.

Fuertes, asentamientos y puestos

Cuando exploréis los mares con la tripulación de vuestro barco, os encontraréis con tierra firme. Y, donde haya tierra, seguro que veréis a gente viviendo en campamentos, asentamientos y puede que incluso pequeñas partes de civilización.

Los lugares con los que os encontréis se pueden categorizar a grandes rasgos en fuertes y asentamientos. Todos ellos controlados y gobernados por distintas facciones locales. La mayoría os permitirán comerciar y comprar suministros si vuestra relación con ellos es buena o, al menos, neutral. Estos lugares se categorizan también en diferentes niveles, del uno al quince. Los más altos se corresponden con el tipo de recursos y el nivel de resistencia esperados y sirven de indicador del nivel que debería tener tu barco antes de atacar estas ubicaciones. Si estáis empezando y aún no habéis probado en combate el blindaje y arsenal de vuestro navío, os conviene centraros en los niveles más bajos hasta que estéis más capacitados.

Vuestro bucanero interior hará que os veáis tentados a llevaros todo lo que no esté atornillado. No obstante, antes de hablar de desvalijar, vamos a ver un resumen rápido de todo en lo que os estáis metiendo.

Asentamientos

A medida que naveguéis y exploréis el océano Índico, iréis descubriendo asentamientos locales distribuidos por las líneas de costa. Algunos son poco más que campamentos temporales, pero los que están más establecidos se pueden comparar con ciudades. Los más grandes actúan como importantes núcleos de comercio o sedes de poder. En los asentamientos se puede comerciar. Además, si vuestro corazón pirata lo desea, hay oportunidades de pillaje.

Centros de producción

Algunos asentamientos se especializan en la producción de materiales refinados. Si queréis dedicaros a la vida honrada, se pueden comprar materiales y bienes y volver a venderlos con fines comerciales o usarlos para fabricar otros elementos.

A los mercantes les gusta frecuentar estos lugares de comercio y cargan mercancía para transportarla hasta su destino a lo largo de rutas de comercio establecidas y fiables. Sin entrar en más detalles, a los capitanes espabilados y emprendedores seguro que les resulta útil esa información.

Estos son algunos de los centros de producción con los que os podríais encontrar:

• Forja: aquí se traen los minerales metálicos para que se refinen en lingotes. Podréis comprar lingotes refinados en estos lugares.

• Maderería: aquí es donde se almacena la madera y donde se producen los tablones. Si buscáis madera para fabricar un nuevo barco o un cañón, podéis comprarla aquí.

• Telar: aquí, la fibra se trabaja para obtener distintos tipos de linos y hebras de calidad listas para su venta.

Puestos

Antes de pasar a los fuertes, hablemos de los puestos. Los puestos son lugares únicos en el sentido de que no son objetivos disponibles para saquear. Se trata de zonas neutrales en las que podéis atracar y reparar vuestro barco, realizar viajes rápidos a otros puestos o guaridas, reabasteceros o simplemente pisar tierra firme para estirar esas piernas cansadas. A menudo podéis encontraros con representantes o líderes de distintas facciones que también están de paso. Hay oportunidades de comercio y, si tenéis suerte, puede que quieran deshacerse de planos de fabricación poco comunes.

Los capitanes interesados en trabajar también pueden encontrar oportunidades para aceptar contratos.

Si el tiempo apremia —y siempre que no transportéis mapas del tesoro legendarios—, podéis aprovechar estas zonas para realizar viajes rápidos. Solo es posible viajar rápido a guaridas o puestos que conozcáis con antelación. Y no olvidéis que este tipo de viaje tiene un precio.

Corren rumores de que existen puestos que usan los piratas y los contrabandistas para esconder y proteger la mercancía obtenida de forma ilícita. Si os topáis con estos alijos, también podéis usar los escondites para liberar más espacio de carga y seguir con la piratería.

Fuertes

Los fuertes son asentamientos importantes con una numerosa población y acceso a riquezas y recursos. Con todo el dinero que entra en estas sedes de poder, es inevitable que no cuenten con buenos arsenales y defensas, y pedirán refuerzos. Hasta a los barcos piratas mejor equipados les resulta difícil saquearlos. Estos focos de civilización protegen las aguas colindantes y no acogen a piratas. No podréis atracar ni comerciar con los fuertes y algunos os atacarán en cuanto os vean.

Desvalijar un fuerte resultará mucho más complicado y es necesario pertrecharse muy bien. La zona que rodea un fuerte suele estar protegida por más torres defensivas que los asentamientos. Si queréis que vaya bien el desvalijo, tendréis que encargaros de esas defensas y del resto por adelantado o en algún momento del ataque.

Cuando estéis listos para dar el siguiente paso en vuestro ascenso hasta convertiros en temibles capitanes piratas, ¡desvalijad sus riquezas!

¡Que comience el saqueo!

Todas esas riquezas y bienes están llamando a vuestras almas de pirata, ¿a que sí? A excepción de los puestos y las guaridas, se pueden desvalijar todos los lugares. Antes de empezar, tomaos vuestro tiempo para reconocer el terreno en caso de que sea necesaria una huida rápida. Usad el catalejo para escudriñar la zona, recabar información útil y peinar todo el lugar. Conoced las clases de defensas o refuerzos que podéis esperar, qué facción domina cada lugar y, lo que es más importante, el tipo de botín que vais a conseguir. Si no os va todo el rollo del reconocimiento, es posible saltárselo, pero tened en cuenta que no sabréis a qué os vais a enfrentar y podríais ir a por lana y salir trasquilados. Pero sabemos que a algunos capitanes les gusta el riesgo, así que, ¡adelante!

Para empezar a desvalijar, poned rumbo a la ubicación que hayáis elegido y, cuando esté a vuestro alcance, se os ofrecerá la opción de empezar. Cuando comencéis un desvalijo, la facción atacada desplegará todo el arsenal a su alcance para defender sus recursos. La situación y vuestras posibilidades de supervivencia pueden cambiar drásticamente una vez iniciado el ataque, ¡así que aseguraos de que contáis con equipos de reparación suficientes para mantener el barco en condiciones para navegar!

Preparaos para la resistencia de las defensas en tierra firme, como las torres de vigía y los refuerzos que llegarán por mar para impedir vuestro progreso. La respuesta defensiva será proporcional a la intensidad de vuestro ataque. Aquellos capitanes que se asocien para trabajar se encontrarán con una respuesta defensiva más contundente.

Cuando comience el saqueo, podréis hacer un seguimiento de la recompensa que os permitirá haceros una idea de vuestro progreso. Como capitanes, podréis permanecer en la zona de desvalijo general para eliminar defensas estáticas y neutralizar los refuerzos que lleguen para detener a vuestra tripulación. En los puntos clave, es posible encontrar el botín saqueado hasta entonces flotando en la zona de desvalijo. Podéis haceros con el botín en ese momento o esperar hasta completar el saqueo.

Resultados posibles del desvalijo

Una vez iniciado un desvalijo, se pueden dar varios resultados posibles.

• El desvalijo puede fracasar si los defensores logran repeler con éxito el ataque hundiendo vuestro barco o provocan vuestra huida antes de completarlo.
• Será un éxito parcial si abandonáis la zona antes de desvalijarla por completo. No pasa nada por minimizar pérdidas si la situación no discurre por los derroteros deseados y os encontráis con una resistencia más sólida de la esperada. Vuestra infamia sufrirá un varapalo, pero conservaréis un barco funcional y todo el botín subido a bordo.
• El resultado óptimo se produce al permanecer en la zona y ocuparos de toda la defensa estática y los refuerzos, ganando así tiempo para que la tripulación pueda completar el saqueo del lugar y conseguir todos los objetos de valor antes de haceros a la mar triunfantes.

Incluso aunque el desvalijo tenga éxito, no es conveniente permanecer en la zona más tiempo del necesario para conseguir el botín. Aunque sea tarde, seguirá llegando un goteo de refuerzos. Zarpad rumbo a puertos más seguros en los que admirar en paz el botín y el dinero recién adquiridos.

¡Enhorabuena por un saqueo fructuoso, capitanes y capitanas! Al completar un desvalijo, aumentaréis vuestra infamia e incorporaréis a vuestra fortuna un botín de materiales, bienes y plata. Una vez saqueado un fuerte o un asentamiento, comprenderéis que no quieran hablar o comerciar con vosotros durante un tiempo.

Agravios a facciones

Nadie dijo que convertirse en un temible capitán pirata fuese sencillo. Para conseguirlo, tendréis que levantar algunas ampollas. Las acciones agresivas, como saquear asentamientos o fuertes de una facción o hundir sus barcos, agravian a las facciones. Las facciones agraviadas se volverán hostiles y os atacarán sin mediar palabra. La buena noticia es que el tiempo cierra las heridas, y las transgresiones más leves se olvidan con cierta rapidez. La mala, que si en un arrebato de piratería hundís sus barcos y saqueáis sus asentamientos, la facción afectada se enfadará (y con razón) y puede que no ponga fin a la hostilidad hasta pasado un tiempo largo. En ese caso, ¿qué podéis hacer?

Podéis atracar en los puertos seguros de una guarida o un puesto y pasar desapercibidos por un tiempo. También podéis continuar navegando y explorando, pero evitando a la facción en cuestión.

Una vez saldada u olvidada la deuda, podréis volver a interactuar con la facción. Hasta la próxima...

Capitanes y capitanas, ya os habéis hecho a la idea de cómo equipar vuestro barco, cuidar de vuestra tripulación e interactuar para obtener un buen botín tanto en tierra como en alta mar. ¿Estáis preparados para hacer crecer vuestra infamia y convertiros en mandamases?

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